Test de Coombs (canino), reactivo 2ml

La prueba de Coombs, también denominada prueba de antiglobulina directa, está diseñada para detectar la destrucción eritrocitaria mediada por el sistema inmunitario que se produce en las anemias hemolíticas autoinmunes y, en algunos casos, con infecciones, trastornos neoplásicos y lupus eritematoso sistémico canino. La hemólisis en estas enfermedades está causada por eritrocitos recubiertos de anticuerpos (IgG, IgM) y/o componentes del complemento (C3). Los eritrocitos recubiertos son lisados en el torrente sanguíneo y/o eliminados por los fagocitos. El reactivo Coombs es un antisuero frente a IgG, IgM y C3 preparado en cabras. Tras la obtención del antisuero, el complemento se inactiva a 56°C durante 30 minutos y, a continuación, el antisuero se absorbe repetidamente con eritrocitos caninos normales lavados. Estos tratamientos garantizan que el reactivo Coombs no reaccionará con los eritrocitos normales. Sin embargo, los eritrocitos recubiertos con IgG, IgM y/o C3 serán aglutinados por el reactivo Coombs, ya que contiene anticuerpos contra IgG, IgM y C3.